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martes, 17 de marzo de 2009

NUEVOS ARMAS PARA RUSIA


El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, anunció hoy que el país pondrá en marcha en 2011 un amplio plan de rearme del Ejército y la Marina.

"El año pasado se logró dotar con armamento moderno a varias unidades y grandes unidades militares y a partir de 2011 arrancará el proceso de rearme de amplias proporciones del Ejército y la Marina", dijo Medvédev, al intervenir este martes en la reunión de los directivos del Ministerio de Defensa.

Según sus palabras, la dotación de las tropas con sistemas de armas más modernos es uno de los puntos clave del plan de implementación del nuevo modelo de las Fuerzas Armadas.

El presidente también informó de que el Consejo de Seguridad de Rusia aprobará dentro de poco la estrategia de seguridad nacional hasta 2020.

"Los planes en materia de defensa a largo plazo deben basarse en la estrategia de seguridad nacional hasta 2020 que será aprobada en un futuro próximo por el Consejo de Seguridad", señaló Medvédev.

Entre las prioridades de la modernización de las Fuerzas Armadas el presidente destacó la optimización de la estructura y del efectivo orgánico del Ejército.

Medvédev insistió asimismo en la necesidad de seguir perfeccionando la enseñanza militar.

"Es preciso adecuar la red de centros de enseñanza militar a las necesidades reales de oficiales", explicó el presidente.

El porcentaje de las armas modernas en disposición del Ejército ruso se elevará al 30% para el año 2015, afirmó hoy Anatoli Serdiukov, ministro ruso de Defensa.

Hacia 2020, agregó, va a aumentar hasta el 70%. Serdiukov recordó que el Ejército recibió el pasado año otro lote de flamantes sistemas antiaéreos S-400 Triumf y que ya se iniciaron los ensayos del submarino nuclear "Yuri Dolgoruki" que se dotará de misiles Bulava.

El ministro hizo estas declaraciones en una reunión de altos cargos ejecutivos de Defensa y en presencia del presidente Dmitri Medvédev, comandante en jefe de las Fuerzas Armadas.

Medvédev, a su vez, se pronunció por incrementar a pesar de la crisis las compras de nuevos equipos para el Ejército, en vez de seguir reparando aquellos que ya forman parte de su dotación.